miércoles, 15 de diciembre de 2010

cambios de verano


Hace mucho que no puedo lograr sentarme y escribir un rato, es un conjunto de cosas que pasan de repente o simplemente en momentos me aburre no tener mucho que contar, o hablar de más de lo mismo.

Todo mal, todo bien… ¿y quién es el que te entiende? Ni vos podes contra eso, tratas de salir, de buscar momentos en que te olvidas que tenías un mundo mejor que este… y que lo perdiste.

Después de una gran tormenta siempre llega la calma dicen, pero si lo único que hace es ocultar que hubo mal tiempo y tapar esas impurezas. De nada sirve rearmar lo hecho, hay que volver a empezar todo de nuevo, de cero… así no encontras ni un puto recuerdo de lo que te hace mal.

Volver a empezar un día, donde el sol cure las heridas de aquellos días de sólida tristeza. Basta de tantos chubascos y chaparrones, quiero todos mis días de sol. Quiero levantarme un día sin saber donde estoy, no tener que preocuparme por los demás, y que nadie se entere jamás donde estoy. Ser una isla, eso quiero hoy.

A veces pienso que la gente que lee mi blog debe especular que soy una depresiva al borde del suicidio, juro que no es así, es que uno siempre escribe cuando tiene algo que decir, algo por lo que la vida se vuelve interesante y se mueve de su curso rutinario.

SIEMPRE una actitud positiva me ayuda a seguir!